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JAVIER TORRES

Ganador del Primer Campeonato de Panadería:

“Este año ha sido puro crecimiento”.



El integrante chileno de la dupla vencedora nos habló de sus planes a futuro y de lo que significó el concurso para seguir impulsando su carrera.




Después de una intensa competencia que empezó en agosto pasado, donde sortearon varias etapas hasta llegar a la final realizada en la Fipach 2024, la pareja conformada por Javier Torres (Chile) y Magdiel Molina (Venezuela) logró adjudicarse el Primer Campeonato Nacional de Panadería, organizado por Indupan y Escuela Internacional Artebianca.

Tras el triunfo, la vida para Torres cambió en 180 grados, ya que de ser un panadero autodidacta que se internó en este mundo en pandemia solo “por rebeldía”, hoy mira el oficio con ganas de seguir progresando y desarrollándose.

“Comencé investigando sobre el pan, con las recetas de la abuela, la mamá, del pan amasado y luego creciendo con amigos que estaban metidos en el mundo de la panadería”, recuerda. Uno de ellos, de hecho, “me empezó a instruir en el tema de los prefermentos, me compartió recetas, procesos y de ese momento no paré de hacer pan”.

Este camino se fue consolidando de manera profesional hasta llegar a convertirse en panadero del Hotel Ritz-Carlton, uno de los más importantes de Santiago. En su lugar de trabajo valoran el logro conseguido, pues reconocen la calidad de las personas que elaboran productos en un recinto de prestigio a nivel nacional e internacional.

“La importancia de este concurso está en poder mirarme y confiar en mi conocimiento y sabiduría, en todo lo que he aprendido para ponerlo a disposición de los demás, demostrándome de lo que soy capaz”, asegura Javier Torres, quien califica este año como “impecable” en lo laboral, “de puro crecimiento y aprendizaje en diferentes tipos de técnicas y panes”.


Un futuro esplendor

Respecto a sus proyecciones de cara al 2025, el integrante chileno de la dupla ganadora del Primer Campeonato de Panadería, afirma que busca la manera de vincular sus afectos, trabajo y profesión.

“Antes de entrar al hotel, comencé con mi emprendimiento llamado “A puro fermento”, una micro panadería que estoy desarrollando con mi señora, donde trabajamos panes de masa madre, amasados, brioche y distribuyendo hacia algunas banqueteras. Además, nos estamos expandiendo a otros tipos de alimentos más allá del pan”, advierte. Con el premio, “se nos ha acercado mucha gente, nos llaman clientes, así que demasiado contentos”, puntualiza.

Uno de los puntos clave a la hora de alzarse con el primer lugar del torneo, fue el trabajo conjunto con su compañero Magdiel Molina, quién próximamente emigra a Argentina para desarrollar proyectos en el rubro.

“Es una cuestión mágica, como si fuésemos una mente al momento de trabajar. Existe una conexión tan grande que entramos en un flujo que nos lleva a hacer una inmensidad de cosas y productos. Estamos sincronizados”, indica Torres.

Consultado si está en sus planes continuar incursionando en otro tipo de productos o recetas, comenta que le queda mucho por aprender aún. “Me quedan montones de tipos de panes por seguir investigando. Me gusta mucho la bollería y también estoy incursionando una pincelada en pastelería y, como comentaba anteriormente, con “A puro fermento”, estamos trabajando en almuerzos, sándwich, hamburguesas caseras y otras cosas”.




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